Por si acaso no has probado aún a cocinar el conejo y estás dispuesto a saborear algo diferente y tradicional, aquí tienes una receta sencilla y golosa. Estos animalitos tan delgaduchos tienen una carne muy delicada que potencia su sabor con las especias adecuadas.

Aparte de la famosa versión del conejo al ajillo, yo no conocía ninguna otra manera de preparar el conejo de granja  hasta que, cómo no, Mercedes bajó con su platito humeante. Ésta es su versión, así que ignoro la procedencia de la receta. Lo único que puedo asegurar es que la rápida preparación y la economía de los ingredientes no desmerecen el sabor del guiso.

Ten en cuenta que se trata de conejo de granja, el que venden en las tiendas. El conejo de monte, como toda la caza, requiere otra preparación y otros condimentos para resaltar la rudeza de su carne perfumada.

Ingredientes

• 1 conejo de granja troceado
• 250g de guisantes (pueden ser congelados)
• 2 cebollas
• 500g de patatas
• 150g de manteca de cerdo o su equivalente en aceite de oliva
• 2 cucharadas de perejil picado
• 2 cucharadas rasas de harina
• 2 tazas de caldo
• Sal, pimienta y generoso pellizco de nuez moscada

Preparación

1. En una cazuela de fondo grueso, rehogar el conejo con la manteca/aceite y la cebolla.
   

   Rehogando

2. Cuando esté dorado, espolvorear la harina y remover durante dos minutos.
   

   Dorado

3. Añadir las patatas y guisantes y saltear otros dos minutos más antes de añadir el caldo.
4. Salpimentar, añadir el perejil, la nuez moscada molida y dejar que cueza a fuego muy lento hasta que se le vaya reduciendo la salsa. Vigilar los últimos minutos para evitar que se queme en el fondo.
   

   Añadiendo caldo y perejil

5. Y listo. Servir caliente.