Cuando se habla de comida casera siempre me imagino un guiso como éste. El típico plato que añoras cuando andas fuera de casa y que te conmueve cuando algún familiar te lo pone en la mesa. No es una fiesta, pero la carne escondida en ese jardín de patatas y zanahorias tan apetitoso y brillante suele alegrar la vista y el gusto. Es de esos platos inexplicables que de niño no te hacía ninguna gracia y que ahora aprecias cada vez más a medida que pasa el tiempo.
Como buen guiso hogareño es de fácil preparación y mejora con el paso de las horas. Admite varios tipos de carne, adaptándose a tu economía: vacuno, cerdo o incluso un corderito ya mayor que le dé un sabor especial de fondo. Y para que sea un verdadero jardín, perfúmalo con las hierbas que encuentres a tu alcance: tomillo, orégano, romero…¡hasta un poco de hierbabuena le sienta bien!
Ingredientes
- 500g de aguja de ternera o añojo, o aguja de cerdo o pierna de cordero.
- 1 kg de patatas (más o menos, según prefieras que predomine la carne o el jardín)
- 300 g de zanahorias
- 200g de guisantes (sirven congelados o incluso de lata)
- 1 cebolla grande
- 5 cucharadas de tomate triturado o rallado
- 100 cc de brandy o vino blanco
- 1 hoja de laurel
- orégano, tomillo y otras hierbas
- sal y pimienta
- 6 cucharadas de aceite de oliva
Preparación
- Calentar el aceite en una olla a presión y saltear la carne troceada y salpimentada.
- Retirar la carne cuando esté dorada. Añadir la cebolla bien picada y dejar que se ponga transparente.
- Cuando empiece a dorarse, incorporar las patatas y zanahorias previamente peladas y partidas y rehogar unos dos o tres minutos.
- Añadir la carne, los guisantes, el brandy y el tomate. Remover y añadir el laurel y las hierbas.
- Añadir agua pero sin que llegue a cubrir los ingredientes. Rectificar de sal.
- Poner la tapa a la olla y cocer a fuego lento si es una cazuela normal hasta que la carne y las verduras estén tiernas, vigilando que no le falte agua. En olla a presión tradicional, la cocción será de 2o minutos y en olla superrápida, es suficiente con 5 minutos de cocción.
- Dejar reposar unas horas antes de servir. ¡Y a comer casero!