Que en mi casa festejen la creatividad de la cocinera es algo comprensible. Que lo hagan con un plato que salió de casualidad, hecho a última hora del día, con los restos de la nevera, empieza a resultar algo sospechoso. Pero que insistan en que cuelgue la receta raya en la insensatez, así que eso me ha convencido del todo y aquí estoy contando cómo hacer un arroz sensacional con tropezones venidos a menos.
Necesitarás arroz, pimientos y restos de carne, pollo o pescado, o fiambre o setas, o lo que encuentres en tu frigorífico al final de mes. Luego tienes que ponerte a cocinar justo antes de dormir, cuando caes en la cuenta de que no tienes nada que llevarte a la boca al día siguiente y no tienes el bolsillo para menús preparados.
Una vez superado el horror y el hastío inicial, en 20 minutos acabarás jurando en arameo por la birria de plato que has preparado. Pero cuando lo pruebes te darás cuenta de que no ha sido en vano el esfuerzo. Las especias no se notarán, pero cuando lo dejes reposar toda la noche y lo degustes al día siguiente, creerás que algún hada ha ido dejando su magia por el arroz, porque no hay otra explicación que justifique la sutileza y los sabores que se han desarrollado durante el reposo.
Ingredientes
- 1 vaso de arroz redondo
- 2 vasos de agua (o caldo de verduras, si tienes)
- 2 cucharadas de curry o cúrcuma (puedes sustituirlo por azafrán, pero no por colorante, que no aporta ningún aroma)
- 1 ramita de curry fresco (existe, sí, en maceta) o perejil
- 1 pizca de jengibre en polvo
- 1 diente de ajo
- 1 cebolla grande
- 1 pimiento grande (el amarillo es más dulce y combina bien con las especias)
- 1 pechuga de pollo cocida o asada, o restos de carne de cocido, o cualquier ingrediente que quieras añadir
- sal y pimienta
- 6 cucharadas de aceite de oliva virgen
Preparación
- Pon el arroz, el agua o caldo, una cucharada de curry y el jengibre en una olla a presión. Añade la sal y cuece (5 minutos si es superrápida, 7 si es la tradicional). Destapa y deja enfriar en una fuente, removiendo con un tenedor para que se vayan separando los granos de arroz.
- Mientras tanto, en una sartén amplia sofríe la cebolla pelada y cortada en minúsculos trocitos. Al cabo de tres minutos, añade el pimiento cortado en cuadraditos y saltea hasta que ambas verduras se ablanden y comiencen a dorarse.
Salteando las verduras
- Corta la carne (o el acompañamiento elegido) en dados y añádelos a la sartén, salteando durante un par de minutos.
- Añade la sal y la pimienta,la otra cucharada de curry y tapa la sartén, dejando que cueza otros dos o tres minutos más. Vigila que no se queme el fondo.
- Añade el arroz hervido y perfumado, saltea el conjunto y sírvelo. Si queda algo para el día siguiente, notarás la diferencia.