No puedo dejar escapar el momento de los fresones. Ahora están en su punto en las fruterías, señalando con su color y su aroma que la primavera se ha instalado por todos los rincones. Y como los pajaritos cantan y las nubes se levantan, los primeros calores invitan a refrescarse con un pastel helado. O semi-helado, que está mucho más rico.

Para ponerlo bonito y cursi, he utilizado un molde de Wilton que deja el relleno en forma de corazón. Este molde fue una de esas insensateces que te llegan directas al corazón cuando las ves y cuando las tienes en casa te arrepientes de tanto romanticismo porque no cabe en ningún sitio. Pero de vez en cuando lo saco del armario y voy derritiendo corazones cuando reparto las porciones.

La tarta no tiene ningún trabajo, a pesar de su espectacular acabado de repostería de barrio: bizcocho de chocolate, crema helada de fresón y nata montada con azúcar en polvo son los elementos básicos. Unos fresones laminados o unas frambuesas frescas coronando la tarta conmoverán hasta los corazones más duros.

Ingredientes

• Ingredientes para un bizcocho de chocolate
• 100 g de azúcar y 100 cc de agua
• 2 cucharadas de ron o brandy
• 500 cc, aproximadamente, de crema helada de fresón, congelada.
• 400 cc de nata para montar (con 35% de grasa)
• Unas cucharadas de azúcar en polvo, al gusto

Preparación

1. Preparar la mezcla de bizcocho según la receta.
2. Sacar del congelador la crema  y dejarla en el refrigerador.
   

   Crema congelada

3. Engrasar un molde de 22 cm con fondo desmontable o el molde que tengas más a mano. Rellenar con la mezcla de chocolate y hornear a 180ºC hasta que esté hecho (comprobar con una brocheta) pero sin que se seque demasiado.
4. Mientras tanto, hacer un almíbar con el agua y el azúcar, incluyendo una ramita de canela o un poco de vainilla, si lo deseas. Hervir durante cinco minutos y dejar enfriar. Añadir el licor y mezclar bien.
5. Sacar el bizcocho del horno y enfriar sobre rejilla. Si es un único molde, cortar el bizcocho por la mitad cuando esté frío.
   

   Bizcochos enfriados listos para empapar con almíbar

6. Empapar con el almíbar ambas mitades y rellenar con el sorbete que estará medio congelado.
   

   Rellenando con sorbete

7. Unir las dos mitades.
   

   Dos mitades

8. Montar la nata hasta que esté bien firme con el azúcar en polvo.
9. Montar las dos mitades de bizcocho.
10. Cubrir la tarta con la nata, comenzando por los laterales y terminando por la parte superior, ayudándote de una espátula.
    

    Cubrir los laterales

11. 

    Cubrir la parte superior

    Introducir en el congelador hasta media hora antes de servir.

12. Decorar con las fresas laminadas o con las frambuesas.
    

    Decorar con frutas

13. ¡A romper corazones!
    

    Relleno amoroso